Nada como celebrar el día de los niños haciendo un paseo con ellos al estilo Que Buen Lugar 🙂 Por eso escogimos un lugar cerca, bonito, seguro, barato y con áreas verdes agradables para toda la familia… se trata de la U para la Paz en Ciudad Colón
¿Cómo llegar?
Se agarra la ruta 27 hacia Ciudad Colón y luego se sigue hacia el Rodeo hasta el final de la calle.
Waze: https://waze.to/lr/hd1u06nnyd
Distancia:3km
Dificultad:Fácil
Accesibilidad:Media
¿Qué llevar?Ropa fresca, repelente de insectos, bloqueador solar, gorra, tenis de trail, cosas para picnic y excelente actitud.
Vehículo: Automóvil
Parqueo: en la orilla de la calle (hay wachis)
Mascotas: Sí (con correa)
Camping: No
Contacto:
Tel:2249-4157
Jueves a Domingo y feriados de 8:00 a.m. a 3:00 p.m.
Costo:¢2500 nacionales y $10 extranjeros
Este paseo fue un poco distinto porque nos fuimos con la familia a pasarla tuanis, iban casi todos los sobrinos de nosotros, los papás de Glori y Tavo, mi cuñado. Este lugar es apenas para picniquear y estar disfrutando al aire libre cerquitica de la ciudad. De camino pasamos a comprar cosas de picar a un mini super y seguimos nuestro camino hacia Ciudad Colón.
Cuando llegamos solamente parqueamos al frente y buscamos un rancho para poner todas las cosas y divertirnos en pelota. El lugar es bien chiva y grande, hay bastantes lagos con patos, ranchos, senderos, zonas verdes hasta tirar para arriba, hay play para los más pequeños, así que era el lugar perfecto para ir con los más pequeños. Lo primero que hicimos fue hacer un mini picnic de frutas para agarrar fuerzas y matar la tripa. Ya con la panza llena corazón contento decidimos irnos a caminar por un sendero que le de toda la vuelta a las instalaciones por el bosque de 300 hectáreas las cuales pertenecen al área de conservación del pacífico.
El recorrido del sendero (seguramente por los baldazos) estaba húmedo con algunas partes resbalosas pero nada del otro mundo, es solo cuestión de tener cuidado con los peques. Aunque muchas veces son más ágiles que nosotros. De camino por el sendero nos topamos con un laberinto hecho de matas hasta el alma de mariposas de todos los tipos habidas y por haber. meterse ahí es bien vacilón y cuesta encontrar la salida, la pasamos bastante bien tratando de salir primero que los chicos. Luego continuamos el sendero bajo la sombra pasando por un mirador apenas para la foto y agarrar el aire necesario para terminar el recorrido.
Cuando volvimos al rancho alistamos la comida que por cierto estuvo mucho mejor porque iban los papás de Tavo que siempre andan preparados con buena comida, así que teníamos sanguches de atún, jamón, uvas,manzanas, picaritas y demás terminando repletos apenas para tirarnos a las hamacas Ticket to the Moon y al zacatico a descansar para bajar la comidota.
El paseo terminó con el sonar de los rayos, estos nos anunciaron el baldazo cercano entonces recogimos el chunchero y de vuelta a chepe con sobrinos felices. Así que si quiere un lugar bonito para pasar un rato en familia este es perfecto.