Ventolera
Si hay algo chiva que nos enseña nuestro país, es que no ocupamos recorrer cientos de kilómetros para llegar a un lugar especial, donde la podemos pasar verdaderamente bien con relativamente poco. En este paseo tuvimos una regresión en tiempo real, esta nos llevó a nuestra infancia con juegos al aire libre que se niegan a ser olvidados entre tanto trabajo, estrés y tecnología.
¿Cómo llegar? Se va hacía Bebedero de Escazú.
Costo: GRATIS
Mascotas: Es un potrero perfecto para llevar a los perros.
Vehículo: 4x4
¿Qué llevar? Mantel, snacks, papalote, cámara, cartones, gorra, jacket corta viendo, anteojos oscuros, bloqueador solar.
¿Comida? Snacks para el camino y una botella de hidratante.
Tiempo: Lo que quiera.
Dificultad: Moderada
Parqueo: En la calle.
Este día teníamos compromisos a la hora del almuerzo, entonces en vez de poner eso de excusa para no salir a pasear, decidimos hacer plan que se adaptara al tiempo que teníamos disponible, para así demostrar que todo es cuestión de actitud y un buen plan. Fue así como decidimos ir a la ventolera. Este es un cerro/potrero que se logra ver desde todo el valle central, está en las montañas de Escazú, y se reconoce porque esta pelado de árboles. Para llegar nos fuimos por la ruta 27, y luego nos desviamos ahí no mas hacia Escazú, donde pasamos al súper a comprar fuerte brunch y cosas de picar. Empezamos a subir un montón, luego que se acaba la calle de asfalto, donde sí es necesario usar un carro 4x4 ya que hay partes de piedra suelta con buenos cráteres en medio. Luego el camino pasa entre árboles y potreros hasta llegar a la parte más alta donde se puede parquear el carro para ir al potrero que se ve desde San José.
Una vez que nos bajamos del carro, se atraviesa la cerca con todos los implementos para potrero dominguero, se baja y luego se sube una panza gigante de zacate hasta llegar a la mejor vista del valle central (y no estoy exagerando). Una vez aquí nos dedicamos a jugar papalotes, tirarnos en cartones, comer cochinadas, ver los caballos y vacas con una vista de fondo increíble. Desde aquí se puede ver fácilmente toda la cordillera volcánica central, un poco de Cartago, San José, Heredia y Alajuela.
Este lugar por si solo es maravilloso, pero pienso que es indispensable llevar cosas para jugar, outfit adecuado, así como un mantel y picnic que lo harán disfrutar aún más de este lugar.