Piedra del Minero - Aserrí
Las montañas del sur de San José eran bastante desconocidas para nosotros hasta hace poco, y nos dimos cuenta que es un lugar con un una cantidad altísima de senderos que se unen y mezclan entre sí creando una red de aventura.
¿Cómo llegar? Llegar a la terminal de buses de Poás de Aserrí, subir 4km llegar al río Poás, de ahí subir por calle de lastre (4x4) subir 1 km y doblar a mano derecha en calle Vigas subir 400m hasta la finca.
Vehículo: Todo vehículo, preferiblemente alto, porque hay camino de lastre. Si van en carro bajo se puede dejar más abajo antes de llegar a la finca.
¿Qué llevar? Ropa y zapatos cómodos para caminar, hidratación, snacks y jacket impermeable.
Distancia: 5 km en total (2.5 km de ida y 2.5km de vuelta) Dificultad: Media, terreno bastante quebrado, y algunas partes empinadas. Tiempo: 4 horas aprox.
Parqueo: Sí Mascotas: Sí Contacto: Allan 7107-6435 Costo: ¢10000 por persona con desayuno o almuerzo incluido. Camping: ¢2000 por persona la noche de camping.
Para este paseo, nos contacto Allan y nos dijo que se conocía la zona desde hace años y que vive en el corazón de la montaña.
Llegar no fue tan difícil, solo los últimos 100 m del camino eran poco amigables, luego de esto llegamos a un rancho como de fiestas donde nos esperaron con fuerte tamalito para desayunar.
Luego de intercambiar un poco con la familia de Allan decidimos salir a bajar el tamal caminando. Entre todos los destinos que se pueden visitar desde este punto decidimos ir a La piedra del Minero porque eran unos 5 km total y así conocer un poco la zona. Realmente lo que sucedió es que quedamos picados con ganas de conocer aún más.
El trayecto fue de bajada por un camino que va por el filo de la montaña entre fincas hasta llegar a una piedra gigante que para encaramarse y llegar arriba, desde donde se podía ver la mejor vista, había que pasar una especie de “puente” que en realidad era un tronco medio enclenque que conectaba dos piedras de esas gigantes. Tavo y Glori lo cruzaron para ver semejante vistada. Yo no subí por cuestiones de seguridad (no se que es miedo), por si alguno de ellos caía poder estar listo para llamar a la cruz roja.
Después cuando ellos bajaron los esperamos debajo de la misma piedra, en una especie de cueva donde se veían las marcas de antiguos intentos para poder sacar oro. Y es que esta fama no es en vano, pues en toda la zona se encuentran piedras con betas doradas, la gran mayoría llamado oro de tontos porque no es real.
Aquí decidimos comer sacar nuestros snacks y hacer un mini picnic para tomar fuerzas para la cuesta que nos iba tocar a la vuelta.
Cuando llegamos arriba, que fue justo a tiempo, nos sentamos en el rancho y se vino un aguacero de esos de verdad. De nuevo nos sentamos en el rancho y la mamá de Allan nos tenía un Arrocito con pollo y frijolitos molidos solo bueno. Indio comido.., puesto al camino, de vuelta a la casa.
FECHA DEL PASEO - Junio 2016