💎 Las Gemelas Fantásticas – Bajos del Toro

¡Sí señores! Volvimos al paraíso de las cataratas celestes... Bajos del Toro. Y es que cuando uno cree que ya no puede haber más sorpresas, aparecen Las Gemelas Fantásticas, un combo natural de doble caída que nos dejó con la mandíbula en el suelo. Esta zona parece un set de película escondido entre montañas y potreros, y cada río tiene su joyita. Estas dos cataratas están una al lado de la otra, ¡y son un espectáculo de otro nivel! 🌊✨

📌 Información útil

🚗 ¿Cómo llegar?

Desde San José podés tomar dos rutas:

• Por Vara Blanca (apto para automóvil)

• O poner Hacienda La Luisa en Waze y luego cambiar al Waze del destino final: 👉 https://waze.com/ul/hd1u461puj

• Vehículo: Automóvil (preferible alto si ha llovido)

• Parqueo: En una calle aledaña

🥾 ¿Qué llevar?

Ropa cómoda, tenis de trail (¡barro garantizado!), jacket impermeable, bolsa seca, snacks y buena actitud.

📏 Distancia y dificultad

• Distancia: 10 km (ida y vuelta)
• Dificultad: Moderada a alta

🐾 Extras

• Mascotas: Sí
• Camping: No

💰 Costos

• Entrada: ¢4000 por persona

📞 Contacto

• Jorge Salazar: 8780-7504

🏞 Nuestra experiencia

Nos alistamos otra vez para visitar el reino de las cataratas: Bajos del Toro. Aquí el menú nunca se acaba, cada visita es diferente y las ganas de explorar siguen creciendo. Esta vez la cita era con Las Gemelas, dos bellezas celestes escondidas entre quebradas.

Como manda la tradición, hicimos la parada obligatoria para empanadas de carne y café mientras esperábamos a los demás. Una vez todos listos, pasamos de largo por Tesoro Escondido y Río Agrio hasta toparnos con una entrada de lastre entre potreros. Ahí dejamos el carro y nos preparamos para lo que venía.

Ni bien habíamos caminado 200 metros cuando se vino el baldazo... ¡pero baldazo de los buenos! Nos pusimos la jacket, mientras Tavo le cantaba una serenata a San Isidro Labrador para que detuviera el aguacero. Milagrosamente, la petición fue escuchada y al rato escampó. Eso sí, el barro quedó tan glorioso como un pozolón espeso... y lo tuvimos que enfrentar durante 9 de los 10 kilómetros totales.

Carlos, el guía, nos comentó que en verano la caminata es más llevadera, pero honestamente pensamos que embarrialarse, resbalarse y reírse es parte del encanto de esta aventura. La ruta nos llevó por potreros durante un buen rato, hasta que empezamos el descenso final al bosque.

Los últimos 100 metros fueron casi verticales, de bajada de nalgas, pero sin peligro si se toma con calma. Y al llegar... ¡BOOM! Aparecen frente a nosotros las dos gemelas: una del río Quebrada Gata y otra del Quebrada Gatita, cayendo con fuerza en una poza celeste de ensueño.

Nos acomodamos entre las piedras resbalosas, soltamos los chunches y sacamos los snacks mientras nos empapábamos de este místico lugar. El agua estaba heladita (nivel 8 en la escala de “¿dónde están mis dedos?”), pero más abajo había una poza más amigable para meterse.

Después del chapuzón y el picnic, colgamos las hamacas Ticket to the Moon y nos echamos un descanso con sonido de río incluido. Finalmente, emprendimos el regreso: potrero, barro, bosque, risas, y llegamos al carro mojados, sucios, llenos de hambre… pero completamente felices.

Las Gemelas Fantásticas no son solo otra catarata en Bajos del Toro. Son una joya escondida que vale cada paso, cada resbalón y cada baldazo. Un lugar para los que buscan experiencias reales, crudas y mágicas, de esas que solo la naturaleza puede ofrecer.