💦 Catarata La 28 - Aventura entre potreros y río en Turrialba
Si estás buscando una caminata desafiante con recompensa visual, La Catarata La 28 en Turrialba es el plan perfecto. Paisajes de campo abierto, un río verde esmeralda y una caída de agua impresionante te esperan en esta joya escondida del Caribe Central.
📍 ¿Cómo llegar?
Tomá la carretera a Cartago y desvíate en dirección al Volcán Irazú. Cuando veás una Y con una virgen, tomá a la derecha y seguí la ruta hacia Santa Cruz de Turrialba.
📞 Contacto guía local: Jorge – 6065-0601 (mejor escribirle por WhatsApp)
💼 ¿Qué llevar?
Ropa cómoda y fresca, tenis de trail, traje de baño, paño, bloqueador solar, snacks para picnic y muy buena actitud.
📐 Especificaciones
- Distancia: 5.5 km
- Dificultad: Media - Alta (especialmente el regreso)
- Vehículo: Automóvil
- Parqueo: En la calle frente a casas
- Mascotas: Sí 🐶
- Camping: No
- Costo:
- ₡7.000 (grupos de 7)
- ₡8.000 (menos de 7)
🚗 Rumbo a Santa Cruz con el cataratólogo
Nos fuimos con Le Chato, compa experto en cataratas y fotógrafo, hasta Turrialba centro. Ahí nos topamos con Jorge, el guía local, y desde ahí salimos juntos hacia el pueblo de Santa Cruz de Turrialba. Parqueamos frente a unas casas, nos equipamos y arrancamos caminata.
🌿 Bajada por potreros y hormigueros emboscados
La caminata arranca suave por camino de lastre, pero después de pasar un portón comienza la verdadera bajadota por potrero abierto. Mucho ojo: el 70% del trayecto no tiene sombra, así que el bloqueador es vital, y cuidado con los hormigueros, que están listos para hacer fiesta si uno se descuida.
💚 Del charral al paraíso
Al llegar al río, la energía cambia completamente. El lugar es brutalmente hermoso: vegetación salvaje, rocas enormes, troncos cruzados y un río de agua transparente que parece sacado de un cuento. Caminamos por el cauce entre piedras y raíces, mientras todo se volvía más verde y fresco.
😍 Llegada épica a la catarata
En menos de media hora por el río, ¡boom! Apareció La 28 en todo su esplendor. Alta, majestuosa y rodeada de un entorno que te hace sentir diminuto. El agua estaba fría, sí… pero después de tanto sudar, era justo lo que necesitábamos. Nos tiramos al agua sin pensarlo y nos tomamos un rato para absorber la magia del lugar.
🧺 Picnic, fotos y vuelta con glúteo fitness
Armamos picnic clásico en las piedras mientras los fotógrafos hacían magia. Luego vino la subida… y aunque nos sacó el jugo, valió cada gota de sudor. Porque no hay mejor sensación que volver al carro con la satisfacción de haber conquistado un lugar increíble, rodeados de naturaleza y buena vibra.
Una catarata poco conocida, una caminata retadora y un escenario que te deja con la boca abierta. Así fue La 28, otro check en el mapa de aventuras con gente que siempre va con toda. 🥾🌊📸